MI VERDADERO BLOG

Por varios meses he venido acumulando una buena cantidad de líneas sobre todo tipo de situaciones. Pensaba que jamás tendría un blog. Suelo hacer planes y proyectos que luego caen en el despeñadero de la inercia. A este paquete de tinta impresa y aleatoria, lo bauticé como: LO QUE YO ESCRIBIRIA EN MI BLOG SI YO TUVIERA UN BLOG .

Mi  hijo es un experto en esas artes de la comunicación y hasta se dedica a impartir talleres a jóvenes, para inducirlos al maravilloso laberinto de las redes virtuales. Sin embargo nada mas cierto que aquello de que en casa de herrero, cuchillo de palo y yo me conformaba con tener mi blog adentro del mas cruel de los armarios . 

Afortunadamente el dia de hoy apareció mi hijo como una epifanía. Mientras yo entraba  a mi abusado seudo blog, él tuvo que escuchar una vez mas, mi queja habitual sobre tener un blog propiamente dicho. Pues bien, me tomo casi por la fuerza para que registrara una cuenta en Gmail que tampoco tenía y luego de luchar en la búsqueda de contraseñas y nombres que estaban ocupados por la infinita cantidad de usuarios , quede registrada y feliz. A partir de ahí podía crear mi blog segun me indico mi hijo. Se tomo tres minutos y algunos segundos para mostrarme las herramientas necesarias para tal fin y luego salió como un rayo de luz, tal como había entrado, dejándome en total desamparo, en manos de la tecnología de agudisima punta . Dude. Proteste. Confieso que pronuncie mas de cuatro palabras grotescas. Perdí la pagina. Perdí las herramientas dentro mi memoria histórica, pero luego de insistir logre controlar la situación hasta conseguir este blog, que ahora me tiene tan contenta.

Se que no he cumplido con las sagradas leyes de una bloguera y el blog de hoy tiene una abundante recarga del pasado, pero prometo firmemente empezar de ahora en adelante a registrarme diario. A sacar hasta las moneditas de centavo de mis bolsillos antes de irme a los brazos de Morfeo.

Ah y  mi hijo es hoy por hoy mi héroe cibernético . Le voy a comprar un regalito , a ver que se me ocurre.